Una sala blanca (o sala limpia) es un espacio diseñado específicamente para controlar la contaminación ambiental. Estos entornos se utilizan en sectores donde la presencia de partículas, microorganismos o variaciones de temperatura y humedad puede comprometer la calidad del producto o la seguridad del proceso.
Las características fundamentales de una sala blanca incluyen:
- Control de partículas en el aire, según los niveles establecidos por la norma ISO 14644.
- Sistemas de ventilación con filtración HEPA, que renuevan el aire de forma continua para mantener la limpieza y presión diferencial.
- Materiales y acabados interiores lisos, resistentes y fáciles de limpiar, que evitan la acumulación de partículas o contaminantes.
- Diseño funcional de accesos, flujos de personal y materiales, para prevenir la contaminación cruzada.
- Monitoreo de parámetros críticos como temperatura, humedad, presión y número de partículas.
En IS CLEAN ROOMS, aplicamos estas características desde el diseño hasta la puesta en marcha, garantizando que cada sala cumpla con los requisitos normativos (ISO, GMP, FDA) y las necesidades específicas de cada proceso. Diseñamos soluciones a medida para sectores como el farmacéutico, biotecnológico, microelectrónica, alimentario y más.